Equitación, cama elástica, tejo y bailes.

Desde que llegamos a la finca de nuestros amigos hemos cambiado un poco nuestra rutina, para empezar ahora nos levantamos más tarde y sin ninguna preocupación de donde tenemos que ir hoy o donde vamos a dormir, es como si estuviéramos disfrutando de unas vacaciones. A media mañana nos acercamos hasta el pueblo de la Calera a desayunar algo, teníamos ganas de un buen desayuno pero solo encontrábamos panaderías, ni siquiera un lugar de fritos. Al final decidimos comprar alimentos en el supermercado y hacernos unos huevos a nuestro gusto.

Regresamos a la finca de Julián, Cesar y Ángela y nos los encontramos practicando equitación. Julián ha comprado un caballo recientemente y hoy fue el primer día que lo montaban. Estuvimos todos montando el caballo, unos mejor que otros pero todos pasando un buen rato. Después nos fuimos a saltar a la cama elástica, creo que desde niño no saltaba en una. Fue muy divertido y Cesar y Julián nos estuvieron enseñando algunos trucos.

Sin darnos cuenta se llegó la hora de la comida y nos fuimos hasta un restaurante local a comer una picadita, un plato enorme con diferentes carnes acompañadas de yuca, plátano y papas. En el lugar había una pista de mini-tejo (deporte nacional que se utiliza como excusa para echar unos tragos y pasar un buen rato con los amigos) y nos animamos a jugar. El tejo se juega en una cancha de arcilla y se lanzan unos discos metálicos con el objetivo de estallar una de las cuatro mechas (pequeños sobres con pólvora) que están en el bocín e ir así sumando puntos. Jugamos casi por un par de horas tirando cada vez mejor y emocionándonos cada vez que alguien prendía una mecha, fue muy entretenido y además nuestro equipo ganó, la suerte del principiante.

Regresamos a la finca y aquí estamos en casa de Julián escuchando música y tratando de bailar vallenato y salsa, creo que todavía nos queda mucho para mejorar nuestros pasos de baile.

Ha sido un día perfecto alejados de cualquier ruido, realizando actividades en la naturaleza y lo mejor de todo, con una gran compañía.

David