Manizales, que berraquera de ciudad

Hoy no teníamos muy claro que íbamos a hacer pero después de hablar durante un buen rato con los bomberos, nos quedó bastante claro, pasaríamos el día explorando Manizales. Al terminar de ejercitarnos estuvimos charlando sobre lugares de interés turístico en la ciudad y uno de los tenientes nos recomendó que fuéramos al recinto del pensamiento. Este bosque húmedo tropical se encuentra a las afueras de la localidad y es perfecto para realizar senderismo y observar la fauna y flora de la región, incluso tiene un telesilla para no perderse nngún detalle del parque desde las alturas. La idea era muy tentadora pero teníamos que trabajar en la página y no sabíamos si nos daría tiempo a ir durante la mañana (al final no pudimos ir).

Durante el transcurso de la mañana varios bomberos se nos acercaron para hablar sobre nuestro proyecto, les pareció bastante interesante. Henry me dio un mini-tour por las instalaciones y me regaló una de sus camisetas con su nombre y todo, voy a parecer el bombero Walker versión 2.0. Henry sale hoy de vacaciones y prácticamente retirado (tiene 60 años y ha cumplido 20 en servicio) y nos convenció para que nos quedáramos y mañana fuéramos a visitar unas piscinas termales que son muy famosas en la ciudad. No nos pareció una mala idea y decidimos quedarnos otro día. Cuando nos marchábamos a turistear un rato, Henry se acercó y nos obsequió un almuerzo típico de la región : arroz con chicharrón, este hombre no paraba de agasajarnos.

Desde este punto el paisaje es verdaderamente hermoso, en un día despejado se pueden llegar a ver 5 diferentes departamentos y el majestuoso nevado del Ruíz con sus 5230 metros de altura situado en el parque de los Nevados. El paisaje es increíble y se nos antojó ir hasta el nevado para visitar las lagunas y los valles lunares que existen a su alrededor pero ya nos quedan pocos días para estar en Colombia y no podemos ir. Aprovechando que estábamos tranquilos en Chipre, comimos el almuerzo que nos regaló Henry pero no nos quedó espacio para las famosas obleas que venden a lo largo de la avenida 12 de Octubre.

Nuestro siguiente punto de interés fue la parroquia del Sagrado Corazón cerca del centro. Nos llamó la atención su enorme torre central y su órgano tubular. Hoy era miércoles de ceniza y había muchísimos feligreses que acudían a que le pusieran su cruz en la frente, ya empezó la cuaresma.

Seguimos caminando hasta que llegamos a la plaza de Bolívar, la plaza principal de Manizales. Esta plaza comenzó a cobrar importancia en 1854 pero la plaza actual fue diseñada en 1980. Se caracteriza por su escultura de “El Bolívar Cóndor” y por sus murales “Vientos de Libertad” y “Preludio de Lanzas Llaneras” que relatan parte de la historia colombiana. A un costado de la plaza se ubica la catedral de la ciudad que asimismo es la más grande del departamento. Esta basílica reemplazo a una iglesia de madera que se quemó durante la década de los años 20. Además de su torre central de 106 metros de altura (que se puede transitar a través del Corredor Polaco) destacan sus vitrales.

Para acabar nuestro recorrido por la ciudad nos acercamos hasta el mercado, sin embargo se sentía un ambiente pesado y rápidamente nos marchamos de allá.

Ha sido un día repleto de historia y cultura de Manizales y el departamento de Caldas. Mañana nos tocará más gracias al ofrecimiento del bombero Walker.

David