En la tierra del humor

• ·         ¿Por qué en Pasto se acuestan con una piedra y una vela en la mesita de noche?

La piedra para tirarla y apagar la bombilla, y la vela para ver si le dieron.

• ·         Un pastuso secuestró a un huerfanito y lo devolvió porque no sabía a quién pedirle el rescate…

Pasto en el departamento de Nariño (nuestro último departamento en Colombia) es conocida como la “Ciudad Sorpresa de Colombia”, su Carnaval de Negros y Blancos (que  nos perdimos porque se celebra la primera semana de Enero), la belleza de sus iglesias y también porque son el foco de atención de los chistes en Colombia ,como lo son los torreoneros en México o los leperos en España.

Después de hacer ejercicio nos marchamos de la gasolinera en la que dormimos  en busca de una panadería para desayunar y aguantar las 7-8 horas de camino que nos habían dicho que se tardaba desde Popayán a Pasto. Según diferentes fuentes debíamos hacer este tramo a plena luz del día y evitando parar demasiado ya que es una zona en la que la guerrilla puede aparecer y nos podemos meter en problemas.

Tardamos unas 5 horas en llegar a Pasto (mucho menos de lo previsto inicialmete) y aunque la carretera fue un desastre total el paisaje resultó ser impresionante. Pasamos por un par de pueblos que nos hubiera gustado conocer un poco más pero como nos recomendaron evitar parar nos quedamos con las ganas.

Llegamos a Pasto con tiempo suficiente para conocer un poco la ciudad. Visitamos el templo de la Merced, la Iglesia San Sebastián y la iglesia de Cristo Rey entre otras. Nos sorprendió la cantidad y variedad de templos que existen en esta ciudad, cada uno con un estilo muy marcado. Pasto se encuentra a 2500 msnm, cerca del volcán Galeras y el clima es frío aunque estamos en verano. Nos sentimos seguros y tranquilos al caminar en sus calles pero nos faltó visitar el Museo del Carnaval y el del Taminango de Artes y Tradiciones Populares de Nariño.

Antes de que anocheciera nos dirigimos hasta la estación de bomberos para pernoctar. Teníamos la sensación que no nos iban a poner problemas y efectivamente nos acogieron con mucha amabilidad. Después de presentarnos, rellenamos un formulario y nos permitieron aparcar la Zaigua en su patio trasero. Nos contaron que otros viajeros se habían quedado con ellos y les gustaba poder ayudar a personas como nosotros, incluso nos ofrecieron dormir en un cuarto pero nosotros preferimos dormir en la Zaigua.

Nuestra plan es cruzar mañana hacia Ecuador, pero estamos a gusto y tranquilos en Pasto y quizás nos quedemos un día más para descansar y conocer más a fondo la ciudad.

Un último chiste dedicado a nuestros anfitriones: Se estaba quemando un club deportivo en Pasto y aunque las llamas iban a destruir todas las instalaciones no dejaban entrar a los bomberos, ¿saben por qué? Porque no eran socios…

Todos los chistes los contamos con el mayor respeto, al fin y al cabo son únicamente chistes con el objetivo de provocar sonrisas :)

David