Ruta de los 7 Lagos

Si en una ruta de 110kms cada poco rato te encuentras con un lago más impresionante que el anterior, solo se puede hablar de un lugar: “Ruta de los 7 lagos” en la provincia argentina de Neuquén en la Patagonia.

Nos levantamos a orillas del lago Lacar en San Martín de los Andes y dimos una última vuelta por este pintoresco pueblo de montaña. Antes de marcharnos Andrea compró su objetivo del día (chocolates) y nos pusimos en ruta.

Nos advirtieron que parte de la ruta iba a estar asfaltada y el resto solo sería camino de tierra, un riesgo totalmente asumible para nuestra Zaigua. Como dato, decir que la ruta transcurre entre los parques nacionales Lanín y Nauel Huapi.

Después de dejar el lago Lacar atrás, los siguientes lagos que nos encontramos fueron el Machónico y el Hermoso. Para llegar hasta el lago Meliquina había que desviarse de la ruta y nosotros preferimos nos salirnos y buscar un buen lugar donde pasar la tarde y la noche.

Después de esos dos lagos llegamos a la cascada Vullignanco y a los lagos Falkner y Villarino los cuales están conectados. Creo que no hace falta explicar mucho sobre estos lugares, las fotografías hablan por sí solas.

Encontramos bastantes zonas para estacionarnos pero la mayoría eran de pago o no eran muy vistosas. Existen campings llamados agrestes en los cuales además de pagar por persona y vehículo en algunos incluso también tienes que pagar por ducharte (50 pesos por persona, 50 pesos por vehículo y otros 15 por ducharte). Por suerte en el lago Villarino existe un camping libre y encontramos una zona en frente del lago espectacular.

Nos sorprendía la variedad de fauna que encontramos: liebres, loros, animales domésticos y…. ciervos, bueno la verdad es que solo los oíamos bramar en la lejanía. Teníamos toda la tarde para nosotros e iniciamos por hacer algo que no hacíamos en meses: bañarnos en el lago. La verdad que el agua estaba congelada pero no pudimos resistirnos a la tentación. El resto del día lo dedicamos a pasear por las orillas, leer, hacer una barbacoa y observar las estrellas, ¿se puede pedir algo más?

David