Hora de escaparnos del calor de la capital paraguaya para sentir la brisa de la ruta. Nos marchamos de Asunción con la satisfacción de llevarnos bonitas experiencias, recorrimos buena parte de la ciudad pero sobre todo nos sentimos muy acogidos por su gente, gracias por todo.
Nuestra primera parada fuera de Asunción fue Luque, bueno más que parada únicamente vimos esta ciudad de pasada. Buscábamos algún lugar tranquilo para aparcar y cocinar algo pero el centro es un gran supermercado lleno de tiendas y gente (y eso que era la hora del almuerzo). Por esta razón decidimos seguir hasta Areguá a ver si estaba más tranquilo.
Nos habían contado que Areguá, la capital del departamento Central, era una ciudad muy conocida por su alfarería y por la iglesia de la Candelaria. A nosotros lo que más nos gustó fue pasear por sus calles. Aunque había muchas tiendas que vendían artesanías, casi todas en la ruta principal, a cada paso nos encontramos con enormes casonas de estilo colonial con jardines inmensos.
Después de turistear un rato decidimos pasar la noche en esta localidad y nos informaron que tratáramos de quedarnos a orillas del lago Ypacaraí. Las playas de Areguá fueron remodeladas recientemente y están totalmente acondicionadas para pasar el día, o en nuestro caso la noche.
Qué bueno es salir de las grandes ciudades y dormir más cerca de la naturaleza, aunque los p… mosquitos incomodan un poco-bastante…
David
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