Hoy hace una semana que llegamos a Rio de Janeiro y entre unas cosas y otras el tiempo se ha ido rapidísimo. Aprovechando que el tiempo mejoró un poco visitamos uno de los iconos modernos más conocidos mundialmente: el Cristo Redentor.
El Cristo Redentor se encuentra sobre el cerro Corcovado a 710 m.s.n.m. dentro del Parque Nacional de Tijuca, uno de los parques urbanos más grandes del mundo. Esta estatua de 30 metros de altura es, posiblemente, la más visitada de Latinoamérica desde que concluyó su construcción en 1931.
Llegar hasta ella no es fácil pero hay diferentes opciones para todos los gustos y bolsillos.
- Se puede llegar hasta la entrada de Paineiras en vehículo privado o caminando y de ahí tomar la camioneta oficial del parque que te lleva hasta el Cristo. Para nosotros ir en la Zaigua era un problema ya que la carretera es muy empinada y además luego había que pagar el estacionamiento. Y bueno, lo de ir caminando, ni se nos pasó por la cabeza, está bastante lejos del centro o las playas y no sabíamos si la zona sería segura.
- Otra opción es ir en tren, el recorrido tiene que ser muy lindo pero para nosotros el costo era elevado.
- Se puede ir en transporte público hasta Paineiras y luego tomar el transporte oficial.
- Y por último, y lo que hicimos nosotros, tomar el transporte oficial desde Copacabana (o también Flamengo) e ir directamente hasta el Cristo. El costo es un poco más elevado que ir por cuenta propia hasta la estación de Paineiras pero merece la pena ya que es más rápido y cómodo. En su página oficial viene toda la información detallada de costos dependiendo la temporada.
Cuando llegamos a los pies del Cristo el espectáculo visual era imponente: Copacabana, Ipanema, Pan de Azucar, la bahía de Guanabara, el centro, etc. Buena parte de lo que habíamos recorrido durante los últimos días estaba enfrente de nuestros ojos. También se podía observar las grandes diferencias sociales, por un lado enormes edificios cerca de la costa que contrastaban con las favelas encaramadas quien sabe cómo en los cerros.
Para ser un lunes había bastante gente pero los empleados nos dijeron que era un día muy tranquilo, como tiene que ser esto los fines de semana o en temporada alta… Nos tomamos las fotos de rigor con el Cristo Redentor pero para mí lo mejor fueron las vistas, hasta pudimos ver el Maracaná.
También vimos el enorme puente que cruza la bahía y que tomaremos en unos días para seguir hacia el nordeste brasileño, ¿qué nos deparará esa región?
David
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